Llega al museo Palacio Dionisi (Hipólito Yrigoyen 622) la muestra del ídolo de la canción «Yo, Sandro», con objetos personales, fotografías y documentos del «Elvis argentino». La apertura será este jueves, a las 19.30.
La exposición contiene vestuario original de Sandro, su colección de instrumentos, sus premios y distinciones, sus letras manuscritas, fotografías inéditas y filmaciones personales en super-8, sus recetas de cocina y muchas anécdotas y testimonios de sus admiradoras y seguidores. De ahí que haya sido considerada mucho más que una exposición: es «un mundo de sensaciones».
«Yo, Sandro» ha recorrido las ciudades de Buenos Aires, Rosario, Mar del Plata, Olavarría y Bolívar, y continuará presentándose en La Plata, Mendoza, San Luis y Neuquén, en el marco del 50° Aniversario del primer disco del ídolo («Sandro y los de fuego»). Puede visitarse de martes a domingos de 10 a 20, hasta el 30 de agosto. La entrada es libre y gratuita.
La muestra viene acompañada de un programa educativo que presenta de manera didáctica este legado artístico que ya forma parte del patrimonio cultural argentino. Niños y adolescentes, por medio de una visita lúdico-participativa, pueden introducirse en el mundo de Sandro y realizar actividades que tienen como eje la música, la poesía, la pintura y la danza.
El nombre original de Sandro era Roberto Sánchez Ocampo. Nació el 19 de agosto de 1945, hijo único de Vicente Sánchez e Irma Nydia Ocampo. Creció en Valentín Alsina, barrio de trabajo y de tango. Precursor del rock nacional e ídolo de la canción melódica, murió el 4 de enero de 2010.
Como los jóvenes de su generación, abrazó la canción motivado por el influjo arrollador de Elvis Presley. Cierta vez, el cantante del grupo «Los de Fuego» perdió la voz y fue reemplazado por el futuro ídolo, quien cantaba y bailaba frenéticamente en el escenario. El grupo pasó a llamarse «Sandro y Los de Fuego». En 1963 grabó un simple con «¿A esto le llamas amor?» y «Eres el demonio disfrazado», acompañado por Milo y su conjunto. En 1964, luego de varios singles, ya con su conjunto, editó su primer LP.
Volcado como solista a la canción melódica y romántica, ganó en 1967 el Primer Festival Buenos Aires de la Canción, con «Quiero llenarme de ti». En 1968 fue invitado al Festival de Viña del Mar, y a partir de ahí vendrían las presentaciones a sala llena en teatros y estadios de América Latina. La crónica señala que el título de «Sandro de América» sobrevino en 1970, cuando cantó en el Madison Square Garden de Nueva York, show transmitido vía satélite al mundo.
Para celebrar sus 25 años de carrera, en 1988 realizó tres conciertos en el Luna Park de Buenos Aires. En 1993, ofreció 18 funciones -batiendo el récord que tenía Soda Stereo- en el Teatro Gran Rex de Buenos Aires con «30 años de magia». Sandro superó su propia marca, con 27 funciones, de «Historia Viva» (1996), y entre octubre de 1998 y febrero de 1999 con el espectáculo «Gracias, 35 años de amores y pasiones», llegó a la insuperable cifra de 40 recitales consecutivos. Grabó con León Gieco, Charly García y Raúl Porchetto, pero también con Olga Guillot, María Martha Serra Lima y Ricardo Arjona.