El mundo perdido de Rodolfo Gerstl se encuentra en Venezuela. Se trata de un mundo de más de dos mil millones de años que tiene maravillas como el Salto Ángel, la cascada más alta del mundo. Este fotógrafo, deportista y economista venezolano ha dedicado 40 años de su vida a esa región que está sufriendo el impacto del cambio climático, pero en particular, el de la inconciencia del ser humano.
Rodolfo Gerstl nació en Caracas en 1952. Se graduó como Economista en la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), en la capital venezolana. En 1977 obtuvo un MBA de UCLA.
Durante los años sesenta formó parte de los pioneros del paracaidismo, en Venezuela. En octubre de 1982 intentó con éxito el primer salto base (caída libre) desde la cima del Salto Ángel, la cascada más alta del mundo. En 1988 realizó el primer salto de la historia desde Kukenan, la segunda cascada más alta; y también saltó el Sari-Sariñama, el sumidero más grande del mundo, ambos en su país natal de Venezuela. Desde entonces, Rodolfo ha desarrollado una profesión a partir de su pasión, convirtiéndose en un reconocido Experto en localizaciones en el área de Tepuys para las principales productoras cinematográficas.
Intentando perpetuar su fascinante experiencia, Rodolfo Gerstl ha elaborado un libro con una selección de imágenes que describen una experiencia prácticamente imposible de expresar con palabras. Este es un libro sobre una conversación entre la naturaleza y él mismo; un diálogo sensorial en el que el agua, los colores, las texturas, las dimensiones y la distancia parecen tener voz propia.
Guiado por sus sentidos, se suelta y se ve envuelto por la sincronicidad entre lo que se siente y lo que se siente. Es el punto de partida, el inicio de su relación con la otra realidad. Implica un intercambio donde ambos mundos se vuelven uno, un acto de comunicación inseparable y vital entre su ser total y el mundo exterior. Y en estos videos nos muestra cómo se hace, disfruta.
Rodolfo ha dedicado su vida al increíble mundo perdido de Venezuela. Durante más de 40 años, ha organizado viajes en helicóptero, a la medida, para cientos de personas de todo el planeta, desde cineastas hasta familias. Pero se ha ido familiarizando con la naturaleza de este maravilloso lugar, desde que hizo el primer salto desde la cima del Salto Ángel en 1982. Y es con esa misma emoción que quiere que el público experimente este mundo. Desde mirar al insecto más pequeño hasta volar sobre la cascada más alta, haciéndole sentir como si estuviera en la cima del mundo.
Enlace para descargar gratuitamente el libro Ángel, un salto al mundo perdido.
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