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Foto: LRDS
El 19 de abril de 1810 fue el día en que Venezuela dio el grito Antiimperialista, proclamando su Independencia, luego de 300 años de opresión.
Todo comenzó aquel jueves santo, cuando un grupo de jóvenes decide llevar a cabo la acción de someter ante el pueblo el mandato de la Corona española a cargo de Vicente Emparan. Para ello lo sometieron y llevaron ante el balcón de la hoy sede de la Cancillería frente a la Plaza Mayor (hoy Plaza Bolívar), y se le exigió preguntar si lo querían como máximo líder de los territorios venezolanos.
El clérigo, tribuno y prócer José Joaquín Cortés de Madariaga, quien había seguido al Capitán General, detrás de éste, hizo señas negativas con la mano, a lo cual la multitud respondió con un contundente “No, no lo queremos”. Al oír esta exclamación, Emparan dijo: “Si no me queréis, pues yo tampoco quiero mando”, y presentó la renuncia de su investidura. Acto seguido se constituyó un nuevo gobierno.
En este sentido, la proclama daba cuenta de las seis provincias de Venezuela, que desconocieron el mandato del Capitán General Vicente Emparan, el máximo representante de la Corona Española y de los funcionarios del rey Fernando VII.
Este proceso Independentista estuvo presidido por el ideal de libertad y lucha de líderes como Juan Germán Roscio, diputado del pueblo en el Cabildo celebrado ese día; Francisco Salias, miembro del cabildo; José Félix Ribas, quien se proponía como representante de los pardos; Francisco Javier Yánez, miembro de la sociedad patriótica; José Cortés de Madariaga, clérigo que se proponía como diputado del pueblo, Martín Tovar Ponte, miembro de la Junta de Gobierno de 1810 y Pedro Arévalo, Capitán pardo clave en el establecimiento de la Junta Suprema de Caracas, entre otras personalidades.
Esta revolución se llevó a cabo sin derramamiento de sangre. Los funcionarios del imperio español degradados fueron llevados al estado La Guaira, encerrados en las fortalezas o confinados a bordo de buques anclados hasta que se les expulsó de Venezuela.
El acta del 19 de abril de 1810, documento redactado por el Cabildo de Caracas, tras la sesión extraordinaria, y aunque no fue declarada jurídicamente la Independencia de Venezuela, políticamente se produjo un cambio radical que culminó el 5 de Julio de 1811, con la firma del Acta de Declaración de la Independencia.
El objetivo de este acto independentista fue emancipar a los hombres y mujeres suramericanos del reino de España, y formar una idea general del concepto de libertad, a través de un gobierno que garantizara la equidad entre las personas en la sociedad, con el fin de mantener la perdurabilidad del ideal de libertad.
Hoy, 212 años después de este grito de libertad del glorioso pueblo venezolano, los patriotas de esta tierra siguen firmes a los ideales de autodeterminación que inspiró la gesta histórica en la ciudad de Caracas y que continúa vigente, defendiendo los valores de la Patria y haciendo frente a los planes injerencistas.
LRDS